Puerto Vallarta, Jalisco.– Un hombre armado fue abatido por elementos de la Secretaría de Marina (Semar), pertenecientes a la Décima Segunda Zona Naval, luego de que amenazara directamente a personal naval en las inmediaciones de las instalaciones militares y se negara reiteradamente a bajar su arma.
De acuerdo con el informe oficial, el sujeto se presentó inicialmente en el exterior del mando naval argumentando que buscaba información; sin embargo, de manera repentina extrajo un arma de fuego y comenzó a amenazar al personal que resguardaba el acceso. Pese a que los marinos le ordenaron en múltiples ocasiones que desistiera de su actitud y guardara el arma, el agresor ignoró completamente los llamados al diálogo.
Un video difundido en redes sociales, muestra al hombre —de complexión delgada, con pantalón de mezclilla, tenis, playera verde oscuro y portando una cangurera— apuntando con una pistola a un guardiamarina, quien pese a estar bajo amenaza directa mantuvo su arma abajo, fuera de la vista, y continuó intentando tranquilizarlo verbalmente, sin hacer uso de la fuerza.
Momentos después, llegaron más elementos de la Marina, quienes se posicionaron estratégicamente: tres de ellos se colocaron de frente, cubriéndose tras una puerta metálica y una barda, mientras que otros rodearon al agresor por la espalda, siguiendo protocolos de seguridad.
El sujeto continuó negándose a bajar el arma y, al desplazarse, quedó de frente ante un pelotón de marinos. En ese momento, apuntó su arma contra uno de los elementos, lo que provocó que un marino accionara su arma de fuego en repetidas ocasiones contra el agresor, impactándolo en el abdomen y pecho. De inmediato, otros dos elementos se lanzaron para desarmarlo y controlar la situación.
Ya en el suelo, uno de los marinos pateó el arma del agresor para alejarla del cuerpo, enviándola hacia el flujo vehicular. Otro elemento que cuidaba el tráfico para evitar una víctima colateral, apenas la vio corrió para inmovilizarla pisándola, evitando tomarla directamente al tratarse de una evidencia.
El hombre, de aproximadamente 30 años de edad, con corte tipo militar, quedó tendido en posición fetal, gravemente herido y desangrándose, mientras personal de Sanidad Naval se acercó para brindarle atención médica inmediata con el objetivo de preservar su vida, pero no lo lograron por la gravedad de las heridas.
La actuación del personal se realizó conforme al Manual de Uso de la Fuerza, precisando que la reacción armada ocurrió únicamente cuando el agresor representó un riesgo real e inminente para la vida de los elementos.
El caso permanece bajo investigación para determinar plenamente la identidad del fallecido, el origen del arma y las circunstancias que lo llevaron a acudir armado a las instalaciones navales.
Cabe destacar que los marinos privilegiaron el diálogo hasta el último momento, aun cuando su vida se encontraba en peligro, actuando únicamente cuando la amenaza se volvió directa, conforme a los protocolos establecidos.



