*A partir del 85 fue Diablo y nada más
*Dos de sus hijos, son cordobeses
*Llegó a Beisborama y suspiró
*Grandes recuerdos de esta ciudad y su gente
Por Noé Flores Cortés
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Daniel Fernández Méndez, regresó a la casa que le vio nacer beisbolisticamente hablando, en aquella temporada de la Liga Mexicana de 1984, cuando llegó prestado de los Diablos Rojos del México para los Cafeteros de Córdoba.
Daniel debutó como pelotero de Liga Mexicana en el estadio Beisborama, con la franela de los añorados Cafeteros de Córdoba; tuvo una temporada sensacional, con 19 años de edad, corría como un gamo tanto en el jardín central, como en las bases; bateó bien como primero en el orden, fildeó mejor y fue Estrella del equipo de casa.
Cuando Diablos se dio cuenta que clase de pelotero era Daniel, lo pidió de regreso y aunque Chara Mansur, le pidió a su hijo Roberto que lo prestara una temporada más, la respuesta fue NO.




Dany Fernández y Daniel “El Travieso” se convirtió en jardinero central titular de los Diablos y primer bat, lugar que mantuvo por muchos, muchos años pues jugó con los pingos 26 temporadas; es huésped del Salón de la Fama desde el 2019 y Diablos retiró su número 11 del equipo en lo que es un merecido homenaje para el hombre récord, con 1837 carreras anotadas, el mejor de todos los tiempos.
Dany Fernández nació el 20 de agosto de 1965 en Cardel, Veracruz y debutó en Liga Mexicana en 1984 en Córdoba, con los Cafeteros; dos de sus hijos son cordobeses.
Al llegar a Córdoba, Daniel Fernández visitó el estadio Beisborama, donde vivió grandes momentos y comentó que sus recuerdos son grandes, pues la gente lo trató muy bien; hubo un poco de tristeza al ver el estadio un tanto averiado con el paso del tiempo, pero a la tierra de los 30 Caballeros, la lleva en el corazón.
En el Beisborama, a la hora de la inauguración del torneo internacional Con Aroma a Café, donde la Academia Harp Helú Diablos Rojos, participa, nombraron a Daniel y salió de la fila de atrás de su equipo a saludar con la gorra en la mano en todo lo alto y los aficionados le brindaron la mejor ovación del evento.
Ahora como manager de la Academia Harp Helú, Daniel ya calificó al equipo a la final y espera rival, pero más allá del resultado, fue agradable tener de regreso en Córdoba a Daniel Fernández, donde siempre será bienvenido.