*En la octava doblete de Alex Morán empujó la 16 con Hernández
Por Noé Flores Cortés
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Con dos fuera en la parte baja de la octava entrada, Hernández conectó imparable por el central y apareció Alejandro Morán con doblete por el mismo sector para producir la carrera 16 que rompió el empate y le dio el triunfo a Grupo Garrido 16-15 en un duelo de poquito más de 4 horas.
Hubo una verdadera lluvia de batazos, 33 en total, donde pudimos apreciar un jonrón de campo de Josué Luna, una polémica provocada por el ampáyer que se quedó estático durante varios minutos antes de marcar un faul, luego de que la bola se fue del otro lado de la barda con casa llena de parte de Rookies, creando confusión.
Fue un juego “loco” porque hubo muchos imparables, varios errores, algunos de ellos mentales que no se reflejan en el box score, así como mal fideo, golpes, bases por bolas y al final fue necesario cruzar información entre los dos anotadores oficiales, para verificar que Grupo Garrido estaba arriba por una carrera.
Rookies puso a funcionar la pizarra en la misma primera entrada; de hecho solo en la quinta y novena no timbró; mientras que Garrido dejó de anotar carreras en la primera, cuarta, sexta y en la novena porque ya no fue necesario que batearan, pero en el resto los primero dispararon 11 hits y los ahijados de Paco Garrido 22.
Rookies hizo 2 en la primera entrada y una en la segunda, cuando reaccionó la tropa de Manuel Esparza con una para 3-1; en la tercera alta los visitantes timbraron otra 4-1, pero en la parte baja se dio el primer rally del juego con Grupo Garrido anotando 7 en la parte baja de la tercera, 8-4.
Los Rookies hicieron 2 en la cuarta 6-8; en la parte baja de la quinta Grupo Garrido timbró en 4 ocasiones 12-6; pero los visitantes nunca bajaron la guardia y lograron 3 en la sexta 9-12.
Otra vez Garrido y su bola de chamacos cuajó 3 en la séptima para 15-7 y parecía que enfilaba a un triunfo con cierta ventaja, pero su pitcheo se cayó en la octava cuando Rookies les cuajó un rally de 6 carreras para empatar de manera sensacional a 15 carreras el juego, ante la algarabía de la porra, pues batearon 11, 3 hits, 2 errores y dos dejados en base.
En ese iningin hubo un batazo grande con casa llena por el jardín derecho, pero la bola se fue de faul, sin embargo, el ampáyer principal se quedó viendo el trayecto de la esférica, sin cantar nada; los corredores vaciaron loas bases y cuando se disponían a festejar, Esparza le preguntó al ampayier que qué había marcado.
La respuesta fue que todavía no marcaba y preguntó al de bases, pero sin respuesta él mismo dijo foul y entonces vino la protesta de los Rookies, pero se mantuvo en su posición que había sido foul y la alegata fue por haber dejado correr la jugada y esperar que el bateador recorriera las bases, sin cantar el foul; al final se decretó que la bola se fue del otro lado de la barda, pero de foul y la pizarra estaba 15-15, pero el ampáyer dijo 15-16.
Se cruzó la información entre los dos anotadores oficiales y la pizarra estaba 15-15; vino Garrido a cerrar la octava donde anotó la 16 que al final fue la de la diferencia y el triunfo para la tropa de Manuel Esparza y para Alejandro Morán, séptimo lanzador y la derrota fue para Luis Rodríguez, tercer pitcher de los Rookies, en duelo de más de 4 horas.