Amatlán, Ver. – Asela “N” y Rubén “N”, este último de 26 años y empleado de una panadería, fueron vinculados a proceso por el delito de feminicidio en agravio de Alondra, una niña de apenas 7 años que murió tras ser brutalmente golpeada.
Durante la audiencia inicial, un juez de control determinó que ambos deberán permanecer en prisión preventiva oficiosa por el plazo de dos años, mientras se desarrolla el proceso penal en su contra. La Fiscalía General del Estado presentó pruebas suficientes para establecer su probable participación en los hechos que derivaron en la muerte de la menor.
El crimen de Alondra ha generado indignación y dolor en la sociedad veracruzana. El cuerpo de la niña fue localizado con visibles huellas de violencia, y las investigaciones apuntan a un entorno de maltrato prolongado. Según los datos revelados por la autoridad ministerial, tanto la madre como su pareja habrían incurrido en actos de extrema violencia que culminaron en el feminicidio.
De ser declarados culpables, ambos podrían alcanzar una pena de hasta 70 años de cárcel, conforme a lo establecido en el Código Penal del estado para este tipo de delitos.
Colectivos feministas y organizaciones de defensa de los derechos de la infancia han exigido que el caso no quede impune y que se apliquen sanciones ejemplares a los responsables.