Xalapa, Ver.- La secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional de la Confederación Auténtica de Trabajadores (CAT), María de Jesús Rodríguez Vázquez, denunció públicamente el preocupante clima de inseguridad que viven las y los trabajadores en la entidad veracruzana, al asegurar que son blanco constante de extorsiones, amenazas, robos e incluso asesinatos.
En el marco de una reunión sostenida con el secretario de Gobierno, Ricardo Ahued Bardahuil, la lideresa sindical expresó su respaldo a las acciones que la administración de la gobernadora electa Rocío Nahle García emprenda en beneficio de las y los veracruzanos, aunque no ocultó su profunda preocupación por la violencia que aqueja a los sectores productivos, particularmente en las regiones norte y sur del estado.
“Es muy complicado trabajar con tranquilidad. No deberíamos estar sujetos a llamadas intimidatorias ni a participar en cosas que no nos competen. Los trabajadores no lo hacemos por hobby, trabajamos por necesidad, para llevar alimento a nuestras familias”, manifestó Rodríguez Vázquez.
La dirigente lamentó que los niveles de violencia contra obreros se hayan agudizado, recordando que el pasado 6 de mayo fue asesinado en el municipio de Oluta el dirigente sindical Marte Bárbaro Hernández Canuto, ex candidato de Morena y líder de la Federación Auténtica de Trabajadores del Estado de Veracruz (FATEV), quien fue ultimado frente a su domicilio.
Además, recordó que en años anteriores otros dirigentes sindicales de esta misma organización también fueron asesinados, sin que hasta el momento se hayan esclarecido los crímenes ni se hayan detenido a los responsables.
Rodríguez Vázquez reveló que incluso en sus oficinas y números personales han recibido llamadas sospechosas con identidades falsas, señalando como ejemplo que supuestamente alguien se hizo pasar por el secretario de Gobierno para intentar contactarla.
“Lo que pedimos es muy sencillo: que un trabajador o trabajadora pueda salir a su empleo y regresar a salvo. No queremos vivir con miedo”, enfatizó.
Finalmente, lamentó que aunque la violencia es un fenómeno que se vive a nivel nacional, en Veracruz se ha recrudecido, y pese a que no ha presentado denuncias formales ante la Fiscalía General del Estado por temor a represalias, hizo un llamado urgente a las autoridades estatales y federales para que intervengan de forma inmediata.
“Lamentablemente, muchas denuncias quedan archivadas. Pero la realidad sigue ahí: somos víctimas de una violencia sin control”, concluyó.