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Coatzacoalcos, Ver.– Los conocidos empresarios porteños Jesús Trujillo Pacheco, Francisco Javier Sánchez Avendaño y el joven Carlos Alberto Bernáldez, yerno del primero, se encuentran desaparecidos desde el pasado lunes 8 de septiembre, cuando acudieron al municipio de Texistepec a revisar una obra que tenían en ese lugar.
Sus familiares temen por sus vidas, pues desde hace ocho días no han recibido ninguna señal de ellos, por lo que pidieron a las autoridades judiciales investigar su paradero. Tampoco se tiene rastro de la camioneta tipo Suburban en la que viajaban ese día.
Jesús “Chucho” Trujillo es un conocido empresario porteño que durante muchos años trabajó para Petróleos Mexicanos (Pemex). Como muchos constructores de la región, ha tenido altas y bajas en su trayectoria, especialmente luego de que Pemex dejó de pagarle, lo que lo llevó a enfrentar una crisis financiera y a subsistir con contratos de la iniciativa privada.
Por su parte, Francisco Javier Sánchez Avendaño tiene un negocio de distribución de aceites, pero al igual que otras empresas de Coatzacoalcos ha resentido la falta de liquidez económica. Recientemente se había asociado con Chucho Trujillo para realizar trabajos de remediación en una planta de residuos en Texistepec.
En cuanto a Carlos Alberto Bernáldez, yerno de Trujillo, trabajaba dentro de la empresa familiar y también los acompañaba el día de su desaparición.
De acuerdo con versiones de amigos cercanos a los desaparecidos, la última conexión que tuvieron los ubicaba en el tramo de la carretera antigua Texistepec–Sayula de Alemán.
De buena fuente se sabe que estos empresarios mantenían tratos con el dirigente campesino Domingo “N” en relación con los trabajos de remediación en Texistepec. No se sabe si su desaparición tenga relación con dichas actividades, ya que en los meses de abril y mayo de este año se suscitaron hechos de violencia con personas que intentaron meterse por la fuerza a las instalaciones de la Excedis, donde presuntamente participaba el inversionista norteamericano Levis Craig, de quien tampoco se volvió a tener noticias tras aquel intento de toma y actos de terrorismo en las instalaciones.
Ahora, con la desaparición de estos empresarios, surgen dudas sobre quién podría estar detrás de los hechos, pues parece un acto de venganza contra Domingo “N”, con el fin de apoderarse de lo que él ha defendido durante años en beneficio de los campesinos de Texistepec.
Se espera una pronta respuesta para localizar a estas personas y aclarar los hechos que siguen rodeando a la gente cercana a Domingo “N”, un líder campesino que continúa acumulando denuncias sin sustento. La realidad, según versiones locales, es que podría tratarse de un trasfondo político, donde alguien busca desplazar todo lo que Domingo “N” ha construido con tanto esfuerzo durante años de lucha.