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José Luis García Morales, coordinador operativo de Pemex en Veracruz y miembro de la Sedena, desapareció el 1 de septiembre tras salir de su centro de trabajo en Boca del Río. Diecinueve días después fue hallado sin vida. Su vehículo apareció abandonado días antes en la carretera Paso de Ovejas–Tamarindo. Versiones señalan que habría sido levantado, reforzando la sospecha de que su caso no corresponde a un crimen común.
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Abraham Jeremías Pérez Ramírez, capitán de navío y titular de la Unidad de Protección Portuaria en Altamira, fue encontrado muerto el 8 de septiembre en lo que oficialmente se catalogó como un suicidio. Sin embargo, su nombre aparecía vinculado a investigaciones por huachicol fiscal y supuestos sobornos dentro de la Marina.
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Adrián Omar del Ángel Zúñiga, capitán de la Marina y exencargado de la aduana de Manzanillo, murió en Sonora durante una práctica de tiro real, calificada oficialmente como accidente. Su fallecimiento ocurrió en medio de investigaciones sobre contrabando de combustibles.
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Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, delegado de la FGR en Tamaulipas, fue asesinado el 4 de agosto en Reynosa en un ataque con armas largas y granadas, presuntamente por su papel en decomisos de hidrocarburos ilícitos.
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Magaly Janet Nava Ramos, auxiliar B en la delegación de la FGR en Colima, fue asesinada en octubre de 2024.
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Fernando Rubén Guerrero Alcántar, contralmirante de la Marina, ejecutado semanas después de Nava Ramos en Manzanillo, Colima. Ambos homicidios compartieron modus operandi y calibre de armas, según reportes.
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Sergio Carmona Angulo, empresario apodado “El Rey del Huachicol”, asesinado en noviembre de 2021. Su muerte marcó el inicio de investigaciones que hoy continúan señalando conexiones entre empresarios, fuerzas federales y redes de contrabando de combustible.
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Además, otros nombres aparecen en la investigación de la red de huachicol fiscal: Anuar González Hemadi (exjuez federal y representante legal de empresa involucrada), Vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna (detenido) y Contralmirante Fernando Farías Laguna (prófugo).
📌 Entre 5 y 8 casos recientes muestran este patrón. Aunque no se puede afirmar que todos estén directamente conectados, la coincidencia es inquietante y evidencia un riesgo sistemático para quienes se encuentran en estos puestos estratégicos.