No es el alcalde electo de Yanga quien tiró el poste con su auto. Enorme parecido entre el político y el que chocó esta mañana.
Ofrecemos una disculpa por el error editorial.
El alcalde electo de Yanga, Rafael Aguilar Martínez, replicó que la persona que chocó con un poste en la zona de Plaza Cristal no se trata de él.
En su perfil personal puso que agradece las llamadas de preocupación de amigos, pero que no es él. Sin embargo, el gran parecido con Francisco Calleja, la persona que realmente chocó y dejó sin luz a la zona de Córdoba, provocó confusión entre los automovilistas que pasaban por el lugar.
Reconocemos el error en esta casa editorial y ofrecemos una disculpa.
Córdoba, Ver.- Durante la mañana de este domingo, en redes sociales y algunos medios locales comenzó a circular la noticia de que el alcalde electo de Yanga, Rafael Aguilar Martínez “Lucho”, habría protagonizado un accidente automovilístico en la ciudad de Córdoba. Según las versiones virales, el vehículo, un Volkswagen Jetta color café con placas YMA-761-A, habría impactado contra un poste de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), provocando la caída de un transformador y dejando sin suministro eléctrico a varias zonas.
El incidente se ubicaba supuestamente en la prolongación de la calle 6, esquina con avenida 21, cerca del puente a desnivel de Plaza Cristal, y la información aseguraba que la unidad se salió de control, derribó arbustos y terminó sobre la banqueta, movilizando a cuerpos de emergencia.
A través de un comunicado en sus redes sociales, Aguilar Martínez aclaró que ni él ni su vehículo estuvieron involucrados en el percance y calificó la información como “falsa” y “malintencionada”.
“Estoy bien, en compañía de mi familia, y quiero dejar claro que lo que circula es una mentira. No se dejen llevar por publicaciones que sólo buscan confundir y generar morbo”, expresó.
El edil electo subrayó que este tipo de difusiones forman parte de estrategias de desinformación y golpeteo político, a pocos meses de que asuma la presidencia municipal.
La confusión y posterior aclaración se dan en un ambiente de creciente confrontación política en la región, donde las campañas de desprestigio comienzan a tomar fuerza.