Orizaba, Ver.- La madrugada de este lunes 1 de diciembre fue encontrado sin vida el cuerpo de un joven de 23 años de edad el cual presentaba visibles huellas de tortura y fue encontrado flotando en las aguas del canal de Virita en el municipio de Orizaba.
El hallazgo generó la movilización policial y de cuerpos de emergencia; fueron trabajadores que laboran en la Compuerta Virita, ubicada sobre la calle De La Agricultura y Ferrocarril Mexicano, quienes observaron el cadáver atorado en la rejilla de la compuerta, dando aviso inmediato a las autoridades.
Al sitio arribaron elementos de la Policía Municipal, de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Estado y de la Secretaría de Marina (Semar), así como personal de Protección Civil y Protección Civil Municipal, quienes confirmaron que el hombre ya no presentaba signos vitales.
Versiones preliminares indican que se trata de un joven de unos 23 años.

Trascendió que se trata de un policía privado que mantenía vigilancia en la bodega de Rovianda ubicada en el parque industrial del Valle de Orizaba, identificado como Eduardo Rojas Trejo.
Se sabe que el infortunado presentaba visibles huellas de violencia, tortura y posibles indicios de agresión física severa, lo que apunta a un probable homicidio.
Más tarde, autoridades de la Fiscalía Regional de Justicia del XV Distrito, con apoyo de Peritos Forenses y detectives de la Policía Ministerial Acreditable, realizaron las diligencias correspondientes y ordenaron a los cuerpos de rescate recuperar el cuerpo del canal.
El cadáver fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) Regional, ubicado en la colonia Francisco Ferrer Guardia, para los trámites de ley e identificación oficial.
La Fiscalía de Orizaba mantiene abierta una carpeta de investigación para esclarecer los hechos, definir la causa de muerte y determinar si el caso se vincula con algún reporte de desaparición reciente en la zona.



