Xalapa, Ver.- Dirigentes de cuatro sindicatos que integran la Alianza Magisterial Veracruzana (ALMAVE) hicieron un llamado a la gobernadora del estado, Rocío Nahle García, para que se reconsidere cualquier intento de reformar la Ley Estatal del Servicio Civil durante el actual periodo vacacional, al advertir el riesgo de un posible “albazo” legislativo que afecte los derechos laborales de miles de trabajadores.
En conferencia de prensa, Ramón Domínguez Polo, secretario general del Sindicato Magisterial Veracruzano (SMV); María Minelia Córdova Herrera, del Sindicato Unificador Magisterial; Carlos Alberto García de la Cruz, del SUMA–LIDERAM; y Gabriel Reyes Salazar, asesor general del Sindicato Estatal de Trabajadores de la Educación, expresaron su preocupación ante versiones que apuntan a una posible modificación a dicha ley.
Domínguez Polo señaló que existe inquietud entre el magisterio debido a que la reforma plantearía la existencia de un solo sindicato por entidad gubernamental, lo que representaría un retroceso en materia de libertad sindical. Añadió que preocupa especialmente que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social pudiera asumir funciones que actualmente corresponden al Tribunal de Conciliación y Arbitraje, lo cual —dijo— afectaría la defensa legal de los trabajadores.
Por su parte, María Minelia Córdova Herrera advirtió que esta reforma no solo impactaría al sector educativo, sino a todos los trabajadores sujetos a la Ley Estatal del Servicio Civil, y subrayó que significaría volver a prácticas del pasado en las que los sindicatos eran controlados desde el poder. Recordó que en Veracruz existen alrededor de 60 sindicatos magisteriales, con cerca de 140 mil agremiados, quienes podrían verse afectados en sus trámites y derechos laborales.





En su intervención, Carlos Alberto García de la Cruz recordó que de manera verbal, el secretario de Gobierno, Ricardo Ahued Bardahuil, habría ofrecido que la reforma quedaría congelada; sin embargo, lamentó que no exista un acuerdo por escrito que brinde certeza jurídica. Reiteró que los sindicatos magisteriales no están de acuerdo con la reforma y advirtió que, de aprobarse en un periodo extraordinario, podrían recurrir a movilizaciones, como ocurrió en 2013. “No aceptaremos un regreso al monopolio sindical ni la intromisión del gobierno en la vida interna de las organizaciones”, afirmó.
Finalmente, Gabriel Reyes Salazar convocó a los sindicatos magisteriales y de otros sectores a mantenerse vigilantes de las acciones que realice el Congreso local, ante la posibilidad de que se convoque a sesiones extraordinarias durante el periodo vacacional.
Los dirigentes reiteraron su confianza en la palabra de la gobernadora Rocío Nahle, pero insistieron en que cualquier reforma debe discutirse de manera abierta, transparente y con la participación de las organizaciones sindicales, respetando la autonomía y los derechos laborales conquistados.



