[vc_row][vc_column][vc_column_text]Jesús Carranza, Ver.- Acribillado a balazos murió un campesino la mañana de este jueves cuando se encontraba en su rancho a punto de la ordeña; fue su hermano quien encontró el cuerpo al irlo a buscar pues habían quedado de verse en cierto lugar para herrar unos becerros; autoridades ministeriales y de servicios periciales levantaron veintisiete casquillos percutidos de armas largas y de arma corta.
Los hechos se dieron a conocer alrededor de las diez de la mañana indicándose que en el rancho El Manantial, ubicado en el tramo de terracería que une a las comunidades de Romero Rubio en Sayula de Alemán con Buenavista en el municipio carranceño, se encontraba un hombre que había sido asesinado a balazos.
Rápido acudieron elementos policiacos para tomar conocimiento y acordonar el área conforme al protocolo del Nuevo Sistema Penal Acusatorio, en espera de la llegada de personal de Servicios Periciales y de la Policía Ministerial.
Al arribo de éstos se entrevistó a una señora que dijo llamarse Rocío Jiménez Sánchez de 29 años de edad, misma que identificó el cuerpo tirado como el de su esposo Mario Galindo Román de 39 años de edad, originario de la comunidad Buenavista de Jesús Carranza y que había salido de su casa alrededor de las 7:30 de la mañana para dirigirse al rancho El Manantial, para la ordeña del día; de ahí marcharía con su hermano para herrar unos becerros. Para ello usaba su camioneta Nissan doble cabina, la cual quedó estacionada en el frente del rancho.
Sobre los hechos y de acuerdo a las primeras investigaciones, los matones ya estaban esperando a que llegara Mario Galindo Román, escondidos dentro de la galera principal del rancho y en cuanto vieron que Mario descendió de la camioneta, comenzó la metralla en contra de la personalidad del campesino.
El cuerpo quedó tendido a un costado de la camioneta, por el lado del piloto, pero él o los asesinos lo arrastraron hacia el interior de la galera para tratar de ocultarlo a la vista de quienes pasaban sobre el camino de terracería. Fue su hermano quien casi dos horas después lo encontró completamente bañado en sangre y con múltiple heridas de armas de fuego en el pecho, abdomen y rostro.
Personal de Servicios Periciales y de la Policía Ministerial localizaron veintisiete casquillos percutidos de armas largas y de arma corta, por lo que se infiere que fueron dos o más los asesinos.
Hasta el momento se ignora quién o quiénes le dieron muerte, pero su crimen podría estar relacionado al robo de ganado en la zona, línea que ya es investigada por las autoridades correspondientes.
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