Carlos GONZALEZ ALONSO
Acayucan, Ver.- No muy conformes por la supuesta sentencia que se le dio de un año de prisión preventiva al presunto asesino de la joven Raquel Cordero, familiares, amigos y conocidos despidieron los restos óseos en el panteón local, portando pancartas y con gritos de “justicia”, sabiendo que por el momento el único sospechoso está detenido pero no por el delito de feminicidio, por lo que podría alcanzar su libertad.
Luego de una velada en lo que fuera el domicilio de sus familiares, la tarde de este jueves, los restos fueron trasladados en una carroza y acompañado de amigos y conocidos, quienes escuchaban las notas musicales de un mariachi local; en la carroza su pequeño hijo que queda ahora sin madre, también acompañaba a darle el último adiós a su mamá.
Sin embargo, entre familiares y amigos más allegados, surgió la incertidumbre porque Alejandro N, el ex novio está detenido, pero no por el delito de feminicidio, sino por otro que fácilmente lo pondría en libertad en la siguiente audiencia, por lo que las autoridades correspondientes trabajan a marchas forzadas para buscar más pruebas en su contra.
Así, con el entierro de los restos humanos de Raquel, se cierra este capítulo de violencia en la zona sur del estado, esperando que las investigaciones continúen para dar con el paradero del verdadero asesino y conocer las causas exactas del por qué una muerte tan terrible y violenta.