Córdoba, Ver. a 29 de julio de 2025.
En respuesta a tus calumnias publicadas en tu pasquín, que buena oportunidad me das José Abella para decirte directamente que no me falló la supuesta campaña de desprestigio que falsamente aseguras dirijo en tu contra, tampoco hundo al transporte público y no intimido a nadie.
Si te contesto hasta ahora es porque nunca leo tu pasquín.
Podemos debatir en donde quieras, yo solo, sin periódico y sin radio, solo con mi dignidad bien representada.
Si te gusta esto, vámonos rápido. Con gusto nos subimos a las redes sociales, arena del público, soy un perro viejo muy jugado. Cada vez que saques algo te estaré mandando respuesta a las redes sociales.
Creo que la gente se va a divertir.
Sirva esta carta para que no crea el actual gobierno que es algo personal, que te conozcan bien, eres mal amigo y traicionero, te lo dije por teléfono y también personalmente el día que fui a tu hangar en la aeropista, cuando estabas con la bruja que te da limpias.
Primero, no necesito hacerte ninguna campaña de desprestigio, ya estás muy desprestigiado ante la sociedad que extorsionas.
Dos, si el seguro no te paga la cámara que un carro tumbó por accidente es porque eres un abusivo. Arréglate con ellos.
Tercero, la disminución en la calidad del servicio se debe a que Javier Duarte te dio concesiones para que metieras autobuses en mis rutas, usando, claro, a tu pasquín para extorsionarlo, como haces con todos los gobiernos.
Por cierto, eres tan mal agradecido, que dices que Duarte es tu amigo, pero ¿te acuerdas cuando traicionaste su confianza el día que te invito a comer a El Faunito y al otro día revelaste la platica de la reunión?
No me extraña, lo traicionero y malagradecido es lo tuyo.
¿Te acuerdas quien te ayudo a organizar y actualizar tus autobuses que le compraste a Christian Betancourt?
¿Recuerdas cuando te lleve a conocer al director de Tránsito del Estado en Orizaba y llegaste de fanfarrón en tu Ferrari?
¿Ya olvidaste que me rogabas para que Grupo Porres te vendiera melaza?
¿Te acuerdas que me suplicaste que no demandara las concesiones que te dio Duarte?
¿Recuerdas que cuando era director de Transporte y Tránsito te ayude a regularizar tus concesiones que habías obtenido con trampas?
Hasta te lleve al Breve Espacio, donde estabas muy contento, y luego madreaste a todos en tu pasquín.
Pero no sólo a mí me traicionaste.
Te acuerdas cuando Domingo Muguira te apoyó para tu campaña fallida a presidente municipal y luego lo traicionaste, exhibiendo su vida privada por todos lados… eso se llama no tener madre.
Pero más allá de lo traicionero y desleal, eres un mal ser humano.
Nunca se me va a olvidar cuando murió tu perro que estaba en tu empresa y acusaste de ello al señor que le daba de comer.
Para tu malsana diversión lo obligabas a seguir, desde lo alto de tu oficina, un punto de luz de una linterna que tenías en tus manos, tal y como lo hacías con tu perro que se murió.
Ojalá hoy lo sepan, los hijos y los nietos, el trato inhumano que le dabas a ese pobre hombre, por cierto una persona muy querida por tu papá.
Así te gusta tratar a la gente. Eres mal hombre, mal amigo, ambicioso y chantajista, pero no te tengo miedo.
Soy confiable donde me paro y no busques que te diga más cosas porque sé más de lo que crees.
Todo mundo dice que estás loco, pero no estás loco, te haces pasar por loco.
Todavía guardo la hoja que me diste para entrar a tu locura de la cienciología, que utilizas para engañar a tus empleados.
No me hagas exhibir las mamparas y fotos que pusiste enfrente de una casa, cuando mandaste a recoger la televisión, la sala y el refrigerador a una persona de la que estabas perdidamente enamorado.
Que sepa la ciudadanía que dices y haces pendejadas para hacerte importante, aunque no lo eres, tus fracasos lo demuestran.
Tengo información para publicar todos los días durante tres meses los métodos ruines y deshonestos que utilizas para chantajear a todo mundo.
Los cordobeses deben saber tus chantajes para permitir que se reabriera la aeropista. Los tengo al 100.
En la próxima los publico, pero va un adelanto: exigías que los Ayuntamientos de Córdoba y Orizaba te dieran una mensualidad. Exigiste un pago aparte en dólares. Que se retirara una denuncia penal…
Si me vuelves a sacar en tu pasquín o en tu radio, ampliaré los puntos.
Te conozco más de lo que imaginas.
¿Quieres que diga públicamente cómo compraste el trapiche? Yo fui intermediario y ni cuenta te diste.
O cuando enfrentabas una auditoría de Finanzas de Gobierno del Estado y según tú se robaron la camioneta en Paso del Toro.
A diferencia de ti, yo no vengo a menos, la sociedad debe de saber que eres tú quien viene a menos, como dice la campaña que orquestaron en tu contra, tienes deudas con bancos y ya nadie te fia ni un clavo ardiendo. Tengo pruebas.
También usas a la gente, como al invidente que mandas a Transporte Público o a las pobres mujeres que enviaste a bloquear mis autobuses que tienen orden de aprehensión y las dejaste solas.
Una por cierto ya murió y ni flores le mandaste con Guadarrama.
Así como utilizas a Enzzo, como si fuera tu esclavo. De Nayeli Ríos, no puedo decir nada, porque ni siquiera sabemos si existe o es un seudónimo.
Pero si existe, les digo a los dos, a Enzzo y a Nayeli, que no se confíen, la naturaleza del alacrán es picar y José Abella es un alacrán.
José Abella no estás enfermo, ni loco, simplemente eres mal amigo, extorsionador, tienes mucha mierda en tu cerebro y tu cara.
Para terminar, te reitero, si yo estuviera al frente de la campaña que dices, verías que no iba a fallar.
En todo caso hoy está comenzando.
Sigue madreando a la gente, estaré al tanto y listo para encabezar una rebelión que tanta falta hace en Córdoba por el mucho daño que has causado.
Has lastimado a mucha gente.
A mí no, te equivocaste.
Soy íntegro y confiable, no chantajista como tú.
Te reitero, soy capaz de debatir donde quieras, en el terreno que quieras y argumentando todo.
Sé mucho de ti y no me rajo.
Estoy listo para la batalla que emprendiste con tus esclavos.
Que quede claro, no soy mi hermano, ni el periodista. Soy Mario Olvera de Gasperín, a mucha honra para lo que gustes y se te ocurra.
Tengo familia, hijos y nietos a quienes dar ejemplo.
A diferencia tuya, que vives como un perro, sin amigos, ni todo tu dinero te alcanza, solo vives con tus perros.
En cambio, yo soy feliz, muy feliz, con muchos amigos, ando sin coches blindados, sin escoltas y tranquilo.
Sé que disfrutas esto, lo sé, pero el karma es más cabrón… solo hay que esperar, no falta mucho.