Cisma en la Liga Mexicana en 1980;
fallida huelga de peloteros, nace ANABE
Cañeros CNPR beisbol con causa, comparte
con sus fans hechos memorables de la pelota
Saltillo ganó temporada extraordinaria
Inició temporada con 20 equipos
Por Noé Flores Cortés
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La historia continúa en el beisbol mexicano, con el apoyo de los Cañeros CNPR de Ángel Gómez Tapia y su equipo de trabajo, esta ocasión abordaremos el tema de lo ocurrido en el lejano 1980, cuando el circuito iba en ascenso, pues se jugó la temporada 1979 y la 1980 con 20 equipos, pero precisamente ese año se registró un cisma; una huelga fallida, pues no fue reconocida como tal y surgió la ANABE.
Cuando la Liga Mexicana vivía su mayor auge, inclusive ya se jugaba con 20 equipos, divididos en dos zonas, norte y sur y ambas en dos divisiones, vino el colapso; la chispa surgió en Veracruz precisamente, en un duelo entre el Águila y los Ángeles de Puebla; sólo se esperaba un pretexto y se dio.
Durante el partido disputado el 6 de abril en Veracruz, entre el Águila y Ángeles de Puebla, se dieron brotes de violencia, cuando al mánager de los poblanos, Jorge Fitch y al resto del roster no les pareció una decisión del umpire, por lo que decidieron reclamar, al “calentarse” los ánimos, se desató una batalla campal entre los peloteros de los dos equipos, la cual fue resuelta violentamente a petición de alto comisionado de la Liga Mexicana, el magnate y propietario de los Tigres, Alejo Peralta y Díaz Alejo.
Tras esa bronca, se anunció un paro o huelga de peloteros y se suspendió la temporada, muy a pesar que legalmente la huelga no fue reconocida; los peloteros ya tenían armado el movimiento y se dio el surgimiento de la ANABE, Asociación Nacional de Beisbolistas.
Los beisbolistas de la Liga Mexicana, en ese entonces cerca de 500, se rehusaron a jugar el final de la temporada y fueron sancionados, muchos de ellos expulsados de por vida de la Liga, aunque años más tarde fueron “perdonados”, aunque no todos.
La temporada 1980 de la Liga Mexicana se inició con 20 equipos Rieleros de Aguascalientes, Águila de Veracruz, Piratas de Campeche, Dorados de Chihuahua, Azules de Coatzacoalcos, Indios de Ciudad Juárez, Bravos de León, Diablos Rojos del Méxicoi, Acereros de Monclova y Sultanes de Monterrey.
Asimismo, jugaron la temporada 1980 de la Liga Mexicana, Tecolotes de Nuevo Laredo, Petroleros de Poza Rica, Ángeles de Puebla, Broncos de Reynosa, Saraperos de Saltillo, Ganaderos de Tabasco, Tigres del México, Osos Grises de Toluca, Unión Laguna de Torreón y Leones de Yucatán.
La directiva de la Liga Mexicana decidió organizar un torneo extraordinario corto para terminar con la temporada 1980 con seis equipos, ellos fueron: Azules de Coatzacoalcos, Indios de Ciudad Juárez, Broncos de Reynosa, Saraperos de Saltillo, Tigres capitalinos y Unión Laguna de Torreón. El campeón fue Saraperos de Saltillo.
Ramón “Abulón” Hernández, quien dio la cara, Jorge Fitchs y Ramón Arano, entre otros, fueron los peloteros que encabezaron el movimiento de la ANABE, para protestar por los abusos de que eran objeto cometidos por los dueños de los equipos en su contra, quienes no les pagaban sus salarios y no reconocían ninguna ley laboral.
La ANABE jugó su temporada y la Liga Mexicana la suya, ésta amenazó a los peloteros que habían decidido no jugar en la Mexicana con expulsarlos de por vida y buscaron por todos los medios bloquearlos.
Para la temporada 1981, la Liga Mexicana regresó con mayor fuerza y dado el poder económico de los dueños de los equipos, acabaron ganando la batalla y la ANABE desapareció; algunos de sus peloteros volvieron al redil y a otros los “perdonaron” y volvieron al circuito, tales como Ramón Arano.