Plan de Ayala, Tamaulipas.-
A escasos 15 días de haberse firmado el Convenio de Revision Integral del Contrato Ley de la industria azucarera, los patrones empiezan a rebelarse en contra el Comité Ejecutivo Nacional del STIASRM que encabeza el líder de Mahuixtlan, Lorenzo Palé Mendoza.
El cobro de favores de la patronal, al no surtir efecto su reclamo en la desaparición y/o modificaciones de varios artículos del Contrato Ley empieza a poner a temblar a la industria azucarera.
En pleno día de muertos, los compañeros de la Sección 7 del ingenio Plan de Ayala en el estado de Tamaulipas, recibieron la noticia que que su Secretario General y los miembros de su Comite, electos el pasado mes de abril de 2024 tienen que regresar a trabajar al interior de fabrica al no emitir la Secretaria del Trabajo y Previsión Social la toma de nota de dicho Comité.
Y hoy es la Sección 7, mañana puede ser la 2, la 13 de Jalisco, la 14 de Sinaloa o la 23 de Potrero, la 26 de San Miguelito, la 46 de Paso del Macho, o muchas más secciones dónde los empresarios retén al propio Comité Ejecutivo Nacional y no reconocer a sus Comités Locales.
Hoy se puede notar claramente que las denuncias del Lic. Pepe Cervantes quien fuese aspirante del grupo Naranja en la elección Nacional están resultando ciertas.
Triste panorama se ve en la industria azucarera, y mucho más se ve que Lorenzo Palé Mendoza y su CEN no tienen la personalidad suficiente para defender al gremio.
Este tipo de acciones contra el sindicalismo azucarero son el pan nuestro de cada día, no hay día que una sección azucarera se queje del desamparo de parte de Lorenzo Palé. En la región el caso más sonado es el de Potrero donde en Noviembre de otros años, más de 1000 obreros laboraban en la reparación del ingenio y hoy solo están laborando cerca de 450, dejando en el desamparo a muchas familias.
Un secreto a voces en Potrero es que José Luis Salinas Gama, jefe de recursos humano solicito a la Sección 23 un reajuste de cerca de 200 plazas a cambio de solicitar más personal.
Triste se ve el panorama para los obreros con un Comité Ejecutivo Nacional que no puede defender a su gente