Río Blanco, Ver.- En el marco de los festejos por el 40 aniversario del Hospital Regional de Río Blanco, salió a la luz una grave crisis en el área de Urgencias, donde incapacidades, vacaciones y la renuncia de varios médicos residentes han dejado al servicio con una cobertura mínima, poniendo en riesgo la atención de los pacientes.
De acuerdo con personal de la institución, de los seis médicos residentes de primer año que había en urgencias, actualmente solo uno permanece activo, luego de que el resto renunciara debido a presuntos casos de maltrato y a la sobrecarga de trabajo.
“Los residentes han abandonado el servicio principalmente por maltrato verbal, psicológico e incluso físico por parte de sus compañeros de segundo y tercer año”, denunciaron.
Los testimonios señalan que los residentes de menor grado eran obligados a cubrir turnos de hasta 14 horas diarias, además de guardias cada cuatro días que podían extenderse hasta 36 horas seguidas. Aunque las quejas fueron presentadas por los canales institucionales, los responsables no recibieron sanción alguna.
Según el personal, tanto el tutor de enseñanza de los residentes en Urgencias, doctor Renné Pateyro Martínez, como el jefe del servicio, doctor Javier Rodríguez Arias, no implementaron medidas para proteger a los médicos afectados.
La situación se ha agravado con la falta de médicos generales debido a vacaciones e incapacidades, lo que ha reducido la plantilla de 4 a 6 médicos por turno a apenas uno o dos.
En los casos más críticos, cuando sólo se presenta un médico, éste debe asumir el área de Triage, que debe estar cubierta de forma permanente, mientras que la atención a pacientes adultos y pediátricos queda a cargo de los pocos residentes o adscritos disponibles.
“Muchas veces son los médicos generales quienes sostienen la operación diaria, a pesar de las condiciones adversas”, señalaron.