Jorge Salazar García. 28/07/24
El atentado (julio 13) contra Donald Trump (DT), sin duda, será uno de los acontecimientos de mayor trascendencia ocurridos en este año. Tal vez nunca se sepa la verdad completa. Aunque, puede especularse que, de haber muerto, el beneficiario sería ese poder oculto que pone, quita y asesina presidentes incómodos. Esto se desprende de la postura crítica, mostrada durante sus campañas y en algunas acciones realizadas en su primer mandato. Además de sorprender positivamente a los trabajadores, causó temblores en el “Estado profundo” afirmando que “todo el sistema (capitalista) estaba amañado”. Incluso, a un mes de ganar las elecciones, desafió a la gran oligarquía californiana (16/octubre/2016), https://www.youtube.com/watch?v=mT8OS5hdAoA) pronunciando un discurso (silenciado) donde prácticamente se erigía defensor de la clase trabajadora, enjuiciaba la política económica y fiscal, condenaba la corrupción oficial, a Wall Street y a las corporaciones.
De aquel discurso se extrajeron las siguiente frases:
-Nuestro movimiento trata de sustituir un fracasado y totalmente corrupto establishment político (EP).
-No hay mentira que (el EP) no sea capaz de contar para mantener su poder a tus expensas.
-El EP, las corporaciones y los medios existen sólo por una razón: protegerse y enriquecerse.
-No tienen presente nuestro bien.
-La democracia esta controlada por un pequeño grupo. Cualquiera que los desafíe será atacado, difamado.
-Nuestro EP corrupto esta detrás de la globalización radical y la privación de los derechos laborales. Sus recursos políticos, financieros y mediáticos son ilimitados, igual que su inmoralidad.
Trump y los Kennedy.
Probablemente esa identificación con las clases populares le llevaron al triunfo en 2016: detenerlo o hacerle fraude hubiera sido muy inconveniente para la credibilidad del sistema, ya en crisis. Al siguiente año de su triunfo, Trump ordenó hacer públicos 2891 (de 3091) informes secretos sobre el asesinato de John F. Kennedy, (22/11/1963, Dallas Texas). Dicha medida, la ordenó debido a su admiración por los Kennedy quienes se oponían a la intromisión de las corporaciones en el gobierno. La Agencia Central de Inteligencia (CIA) se reservó 200 informes, argumentando que comprometían la seguridad nacional. Trump acató la censura declarando: “…dadas las ADVERTENCIAS de los responsables de inteligencia, no tengo más remedio que aceptar ciertas condiciones antes que causar un daño irreversible a la seguridad de la nación”. Por supuesto, se desconocen las advertencias, y los daños a que se refería, y la información develada no fue suficiente para demostrar si los asesinatos se debieron a conspiraciones o no.
La banca judía
Cinco meses antes de ser asesinado, J.F. Kennedy había firmado el decreto ejecutivo 11110 con el cual rescataba la soberanía de emitir moneda y determinar la política económica. Estas facultades gubernamentales habían sido cedidas a la Junta de la Reserva Federal2* privatizada; la cual podía hacer y prestar dinero sin tener respaldo sólido (oro). La moneda respaldada por oro (del Estado), condenaba a muerte el dinero creado por la Reserva Federal: su respaldo era papel, el dólar. Lamentablemente sólo se emitieron 4.3 millones de dólares llamados “Kennedy”. L. B. Johnson, el sustituto de Kennedy, tan pronto asumió el poder, suspendió su emisión.
Siendo Fiscal General, Robert F. Kennedy, manifestó su intención de reactivar el decreto y profundizar la investigación del asesinato de su hermano: lo mataron en 1968, durante su propia campaña presidencial. Las indagaciones de este nuevo magnicidio estuvieron saturadas de irregularidades. Por ejemplo: el médico forense Philip Van Praag descubrió que hubo 13 disparos, no 9, reconocidos oficialmente; el cuerpo de Robert recibió 4 impactos, no 3; el arma de Sirhan (revólver Iver Johnson, calibre 22) únicamente tenía capacidad para ¡ocho! balas. Necesariamente, tuvo que haber otro tirador. El decreto sigue vigente, pero congelado: aquella Reserva Federal continúa imprimiendo billetes sin respaldo, endeudando a la Nación. Con esto tuvo que lidiar Trump y, de cierto modo, combatirlo: postulándose para un segundo periodo. Le hicieron fraude y lo procesaron.
Acostumbrado a pelear, Trump, logró su postulación en este año, probablemente utilizando como chantaje los archivos con información reservada que sustrajo. Esto explica porqué se reunió con Robert Kennedy hijo (candidato independiente) después del “orejicidio”.
Siguiendo la línea del dinero, la directriz señala a banqueros y políticos corruptos como autores intelectuales de los magnicidios de John y Robert. Una consecuencia de esos crímenes es la pavorosa deuda actual de 33 billones de dólares. Pues un mundo sin deuda, como se sabe, ¡no es negocio para ningún banco!. En estos momentos, detener esa ignominia, provocaría un colapso del sistema capitalista. Evitarlo requiere: guerras, la agenda 2030, consenso de Washington, tratados comerciales, gobiernos corruptos, presidentes populistas, asesinatos, etcétera.
Vance y Kamala Harris: alfiles del Estado profundo
Trump poco pudo hacer contra los privilegios de los banqueros y la precarización laboral norteamericana: “las carreteras y puentes se hacen pedazos; nuestros aeropuertos están en condiciones tercermundistas, y 43 millones de estadounidenses se alimentan con vales de comida”, (Trump).Su resistencia a la sumisión total, causó le hicieran fraude en 2020 e impusieran en la presidencia a un ser disminuido en todos los aspectos (Biden) para seguir “tirando de las cuerdas y manipulando cosas” (Gordon Adams)3*. Seguramente, las promesas de eliminar privilegios a las corporaciones y terminar con las guerras de Ucrania y Gaza, espantaron a los banqueros, al grado de intentar eliminarlo físicamente. La jugada falló y ahora tendrán que enfrentar a un Trump fortalecido: el asesinato o un fraude electoral en lo que resta de campaña causarían una inestabilidad política cercana a la guerra fratricida. Ahora procede la guerra sucia mediática y anteponerle un contendiente formado conforme a sus cánones: Kamala Harris. Investigaciones independientes descubren su personalidad real: insensible a los pobres y migrantes, falsa ecologista, ajena a los niños, servil a los poderosos (https://www.youtube.com/watch?v=ruOVoqATbM4), sin escrúpulos, esclavista, benefactora de banqueros y mafiosos ( fue pareja de Willie Brown, abogado de criminales). De ellos está recibiendo financiamiento, principalmente de George y Alex Soros, amigos de Claudia Sheinbaum y AMLO. Los 4 respaldan plenamente la Agenda 2030.
Trump: un conservador con discurso populista
El último presidente gringo sensible al sufrimiento de los asalariados fue Kennedy. Durante su corto periodo apoyó el Movimiento por los Derechos Civiles, algo que Trump quiere emular. Varias cosa son seguras, con Trump o Kamala: el racismo, desempleo y la injusticia permanecerán, pues son características inmanentes del capitalismo salvaje. Pero bueno, de triunfar Trump, con 8 cosas que cumpliera se ganaría un pedestal en la historia mundial: detener la guerra en Ucrania, reconocer el Estado Palestino, reactivar el decreto 11110, devolver la esperanza a los trabajadores, terminar el bloqueo a Cuba, retirar bases militares, iniciar un diálogo mundial para la paz y claro, revisar los injustos tratados comerciales. Sus actitudes patrioteras y populistas han atraído al electorado. También fue buena la estrategia de sumar a su antes detractor, J. Donald Vance4*: pues sería su vicepresidente en caso de ganar. Vance es otro conservador publicitado como humanista y sangre joven, ¡Igual que Kamala! Si la élite decidiera eliminar a Trump siendo ya presidente, Vance sería el perfecto Caballo de Troya. Faltaría saber de quién: ¿del establismenth? o ¿de Trump? Lo claro hasta ahora es que el atentado fue real y puede ser ligado a George Soros, un banquero muy ligado a México, donde los bancos ganan más que en sus matrices.
México-Trump
Lo anterior no significa que Trump sea un hombre de izquierda o el bueno de la película. Puede considerarse, si acaso, un simpatizante de ese capitalismo humano, reforzado por AMLO en México y recomendado por el foro de Davos. De no existir un partido de masas, organizado y dirigido por los ciudadanos o un movimiento independiente de trabajadores, la mafia del poder no cederá espacio a una revolución pacífica. Aquí y allá, el que gane tendrá que cohabitar con las mafias políticas y económicas. Hábilmente, el tabasqueño supo lidiar con el lado racista, grosero y prepotente de ese yanqui que, además de no asistir a su toma de posesión, había calificado (2015) a los migrantes mexicanos de violadores, drogadictos y criminales. Respecto a este asunto, en mayo de 2018, el republicano dijo: los migrantes no son personas, estos son animales”. Con parecido populismo, Trump y AMLO renegociaron ese TMEC que sirve a los intereses de las grandes corporaciones.
De momento, el efecto inmediato del fortalecimiento electoral de Trump fue que Elon Musk, suspendiera temporalmente la construcción de su fábrica de autos Tesla, en Nuevo León. De hecho, su reelección sería una advertencia sobre la posible intervención militar yanqui para combatir los cárteles mexicanos: porque “están dirigiendo a México”, dijo Trump.
Ruego y subordinación
Tanto Trump como Vance están dispuestos a intervenir militarmente en México. Si AMLO entregó la plaza al enemigo, al menos no debería ser tan cínico suplicándole a Trump (aunque lo haya dicho con ironía): “no me mande a la chingada”, todavía. ¿A ese grado de subordinación inconsciente llegó? Esto rebela que los mexicanos ya no tenemos la facultad soberana de poner y quitar presidentes. Todo volvió a quedar en manos de la mafia del poder.
2* Conformada por los 12 principales bancos: decide la política monetaria de EUA; vigila a los bancos, controla el sistema financiero.
3* Experto en política de defensa y seguridad nacional.
4*Netflix exhibe actualmente su biografía, basada en su libro titulado Hillbilly, una elegía rural (2016).