*Su trabajo no influyó en el resultado
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Calificar el trabajo de un árbitro no es nada fácil, sobre todo, si tomamos en cuenta que el error arbitral, es parte del juego, muy a pesar de que ahora existe el VAR que en muchas ocasiones, termina embarcando a los silbantes.
El trabajo del silbante orizabeño Jorge Antonio Pérez Durán en el clásico América contra Chivas debe ser calificado como aceptable, pues su actuación no influyó en el resultado; pudo haber habido errores pero no fueron al marcador.
En la cancha del estadio Azteca, destacó una decisión de alto rigor que debió tomar, cuando estaba por terminar el primer tiempo y el central Hiram Mier cometió una falta sobre Federico Viñas, la cual el silbante calificó con tarjeta amarilla. El VAR la revisó y lo llamó para que fuera él quien observara la pantalla y decidiera y ello, no cambió su decisión.
Pérez Durán originario de Orizaba, hizo un buen trabajo en el duelo más atractivo de esta ronda, por ser el clásico nacional, por lo que pudiera ver acción en semifinales y es candidato para dirigir su primera final del futbol mexicano de primera división.
