*El ayuntamiento hace enormes agujeros en la tierra y sepulta ahí la basura
Rancho Los Limos, Paso del Macho, Ver.- Desde el mes de septiembre agricultores de esta zona despertaron en la noche al oír maquinaria pesada. Al acudir a observar, descubrieron que era personal del ayuntamiento haciendo enorme agujero en la tierra que era cañal, de un diámetro cercano a 200 metros y una profundidad de 20 metros aproximadamente.
Al día siguiente comenzaron a llegar camiones recolectores de basura a depositar los desechos de Paso del Macho y luego de otros municipios.
Liliana Yépez, apoderada legal de la señora Guadalupe García Millar, propietaria legal de Los Limos, acudió al ayuntamiento a denunciar que no existe derecho de contaminar para siempre el rancho, pues una vez que lo recupera la dueña, no le va a servir para nada.
Actualmente lo tiene Antonio Calderón, excandidato panista a la alcaldía de este municipio.
Le respondieron que hasta enero le podrían tramitar el tema ante la Procuraduría del Medio Ambiente.
Mientras tanto las familias de Los Limos que llevan 50 años viviendo en el lugar, están rodeadas de fétidos olores y moscas verdes en sus dormitorios y cocinas y todo rincón de sus casas.
Las familias de la colonia Cardenista no están mejor, se organizan para exigir a la autoridad municipal que deje de llevarles los desechos de toda la región.
A 800 metros en línea recta, otro terreno ya fue devastado de forma similar, fue alquilado por Serafin Calderón, hermano de Antonio para ocultar miles de toneladas de basura en enormes agujeros, que fueron tapadas con tierra.
Vecinos de ambas congregaciones aceptan declarar, de forma reservada pues temen por su seguridad. Detallan que han recibido amenazas al querer hablar con el usufructuario del terreno, Antonio Calderón.
Los pobladores creen que es atentar contra la vida de todos ellos, al ignorarlos y llevarles enfermedades digestivas y respiratorias.
Los terrenos usados para ocultar la basura son desaparecidos a simple vista, hay que entrar entre cañales y maizales. Los carros de basura entran siempre de noche.