[vc_row][vc_column][vc_column_text]Hasta nueve años de prisión podrían recibir los funcionarios que desobedezcan las suspensiones judiciales relacionadas con las obras de los aeropuertos de Santa Lucía y Texcoco, advirtió el ministro en retiro, José Ramón Cossío.
Si un funcionario público desobedece alguna de las suspensiones judiciales que prohíben el avance de la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, o la destrucción de las obras del aeropuerto de Texcoco, podrían enfrentar condenas de hasta nueve años de prisión, advirtió el ministro en retiro, José Ramón Cossío.
Durante su entrevista en Aristegui en Vivo, Cossío expuso que aunque varias suspensiones son provisionales, y pueden ser confirmadas o revisadas, la Constitución prohíbe su desacato, mientras que la Ley de Amparo que establece las penalizaciones a las que puede hacerse acreedor un servidor público, que van desde la destitución del cargo e inhabilitación, hasta sanciones económicas, e, incluso, penas de prisión de tres a nueve años.
“Me parece muy peligroso el discurso que ha adoptado el Presidente y algunos secretarios de Estado cuando dicen que les da igual, que la obra va a seguir”.
Aunque el Presidente no estuviera involucrado en el desacato a una orden judicial, si podría fincarse responsabilidad sobre secretarios de Estado, subsecretarios, directores generales, encargados, explicó el Ministro en retiro.
Para José Ramón Cossío, la desobediencia de las suspensiones “no es un asunto trivial”, pues los funcionarios que insistan en seguir la obra “podrían generar una crisis constitucional de gran importancia”.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]