Redacción
BBC News Mundo
30 enero 2025
Un avión de American Airlines chocó contra un helicóptero militar cerca del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington DC y las dos aeronaves cayeron al río Potomac la noche de este miércoles.
El avión comercial transportaba a 60 pasajeros y cuatro tripulantes, mientras que tres soldados del ejército estadounidense iban a bordo del helicóptero Black Hawk.
Las autoridades no creen que haya sobrevivientes del accidente. Por el momento se han recuperado 27 cuerpos del avión y uno del helicóptero, según informó en una rueda de prensa John Donnelly, jefe del Departamento de Bomberos y Servicios de Emergencia en Washington DC.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos informó que el avión regional Bombardier CRJ700 chocó con el helicóptero cuando se acercaba a la pista alrededor de las 21:00 hora local (02:00 GMT del jueves).
El vuelo 5342 de American Airlines cubría la ruta de Wichita, Kansas, a Washington DC.
“Nuestra preocupación son los pasajeros y la tripulación a bordo del avión”, declaró American Airlines en un comunicado. “Estamos en contacto con las autoridades y ayudando con los esfuerzos de respuesta de emergencia”.
El director ejecutivo de la aerolínea, Robert Isom, expresó su “profundo dolor” por la colisión y señaló que “nuestro objetivo ahora mismo es hacer todo lo que podamos para apoyar a todos los afectados”, dijo en una rueda de presna conjunta con las autoridades. .
Desde el mismo aeropuerto, la alcaldesa de Washington DC, Muriel Bowser, calificó el evento como “muy trágico”.
Bowser explicó que los servicios de emergencia de toda la región metropolitana de Washington están “trabajando diligentemente” en “condiciones muy oscuras y frías” para ejecutar la operación de rescate en el río Potomac después del accidente aéreo, y agradeció sus “esfuerzos heroicos”.
Sin embargo, tras horas de rastreo, las autoridades lamentaron en una rueda de prensa a primera hora de la mañana que las tareas de los servicios de emergencia habían pasado “de ser una operación de rescate a una de recuperación (de cuerpos)”, señaló Donnelly.
En el lugar podía verse miembros de los equipos de rescate trepando por los restos del avión que sobresalen del agua.
La alcaldesa añadió que personal de American Airlines está en el aeropuerto hablando con las familias.
Entre los pasajeros había deportistas, entrenadores y otros miembros de la federación de patinaje artístico de EE.UU. que regresaban de un campamento de formación, lamentó el organismo en un comunicado. También había dos patinadores rusos y otros ciudadanos de esta nacionalidad, informó el portavoz del Kremlin.
Las dudas sobre las causas
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que se mantiene “completamente informado sobre el terrible accidente”.
“Que Dios bendiga sus almas”, señaló en un comunicado. “Gracias por el increíble trabajo realizado por nuestros socorristas. Estoy monitoreando la situación y proporcionaré más detalles a medida que surjan”.
Posteriormente, el mandatario publicó un mensaje más crítico en su plataforma Truth Social.
“El avión estaba en una línea de aproximación perfecta y rutinaria al aeropuerto”, escribió Trump.
“El helicóptero estuvo yendo durante un largo rato directo hacia el avión. Es una NOCHE CLARA, las luces del avión estaban encendidas.
“¿Por qué el helicóptero no subió ni bajó, ni giró? ¿Por qué la torre de control no le dijo al helicóptero qué hacer en lugar de preguntar si vieron el avión?
“Esta es una mala situación que parece que debería haberse evitado. ¡¡¡NO ESTÁ BIEN!!!”, lamentó.
Un funcionario que habló bajo condición de anonimato con la agencia de noticias Reuters dijo que no había ningún alto funcionario en el helicóptero.
El helicóptero, un Sikorsky H-60, había despegado de Fort Belvoir, en Virginia.
El flamante secretario de Transporte, Sean Duffy informó que el fuselaje del avión de American Airlines estaba boca abajo y partido en tres secciones.
Tanto el avión de pasajeros como el helicóptero seguían un “patrón estándar de vuelo”, dijo Duffy.
“El helicóptero era consciente de que había un avión en la zona”, declaró, no obstante el secretario de Transportes, quien no quiso entrar en demasiado detalle sobre la información que baraja la Administración Federal de Aviación.
“Es evidente que algo ocurrió”, afirmó, y añadió que se sabrá más a medida que avance la investigación.
Duffy prometió que “no descansaremos hasta que tengamos respuestas para las familias y para los americanos”.
El gobernador de Virginia, Glenn Youngkin, indicó que los socorristas de todo el norte de Virginia, Washington DC y Maryland se han movilizado en respuesta al accidente en el río Potomac, que marca el límite entre DC y Virginia.