Gerardo Luna
Amatlán, Ver.- La tarde de este sábado fue localizado el cuerpo sin vida de un joven que había sido reportado como desaparecido desde el pasado fin de semana, luego de haber sido arrastrado por la corriente del río Atoyac.
El hallazgo tuvo lugar en la represa conocida como Ojo Chico, ubicada cerca de la comunidad de Ojo de Agua Chico.
La víctima fue identificada como Ángel Miel Rivera Cruz, de 19 años de edad, quien ingresó al cauce del río el sábado anterior y, según los reportes, ya no logró salir.
Testigos señalaron que el joven fue arrastrado por la fuerza del agua mientras se encontraba nadando, y desde entonces no se tenía rastro de su paradero.
El operativo de búsqueda inició el domingo, con la participación de elementos de Protección Civil del municipio.
Las labores continuaron el lunes, sin que se obtuvieran resultados positivos. Según fuentes oficiales, la falta de equipo especializado y la limitada capacitación del personal dificultaron las tareas de localización, motivo por el cual las acciones fueron suspendidas temporalmente.
Fue hasta este sábado, casi una semana después del incidente, cuando personas que transitaban por la represa notaron la presencia de un cuerpo atrapado entre ramas y rocas, por lo que de inmediato dieron aviso a las autoridades correspondientes.
Elementos de la Policía Municipal, Protección Civil y servicios periciales se trasladaron al lugar para realizar el rescate del cuerpo y las diligencias necesarias.
Peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron el levantamiento del cuerpo e iniciaron las investigaciones pertinentes para esclarecer las circunstancias exactas del fallecimiento.
Aunque la identidad fue confirmada por familiares en el sitio, será la necropsia de ley la que determine oficialmente las causas de muerte.
El hallazgo puso fin a varios días de incertidumbre y angustia para los familiares del joven, quienes habían solicitado apoyo a través de redes sociales y diversos medios para intensificar la búsqueda.
Tras la localización, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO) para los trámites legales correspondientes.
Este caso ha generado preocupación entre los habitantes de la zona, quienes han solicitado mayor vigilancia y señalización en puntos de riesgo del río Atoyac, especialmente durante temporadas de lluvias, cuando el nivel del agua incrementa considerablemente.
Las autoridades municipales no han emitido hasta el momento un pronunciamiento oficial sobre las condiciones en las que se llevó a cabo la búsqueda ni sobre posibles medidas preventivas a futuro.