POTRERO NUEVO, ATOYAC, VER.- Aún está debatiéndose la aceptación o no de la propuesta del Grupo Beta San Miguel por el reparto de Utilidades, que llevó a cientos de obreros a manifestarse en la CdMx, frente al SAT y a la Secretaría del Trabajo.
La empresa en la mesa de negociaciones ofreció 31 MDP, 15 MDP de bono, por el año fiscal 2021, 10 MDP por el reacomodo (permitir la recategorización de 127 plazas), 3 MDP de un bono que debían pagar el 20 de junio y les sería adelantado, otros 3 MDP del bono de productividad 2019 que no pagaron en el periodo anterior de Ignacio Román. Este lunes 6 de junio volverán a firmar la minuta de aceptación la Secretaría del Trabajo, pero no hay postura fija, dicen obreros.
Una fuente señala que “Al término de la asamblea convocada el día de ayer sábado 4 de junio los obreros de la sección se enteran que regresaron con las manos vacías. Reclamaron que Tomas Méndez Machuca no estaba con los obreros cuando fueron agredidos, nadie sabe dónde andaba.
Desde que Modesto Trujillo y su hermano Horacio fueron golpeados y trasladados a un hospital privado hasta el día de hoy, ni Tomás Machuca ni miembros del comité local fueron a ver cómo estaba su estado de salud. Es más, dejaron abandonado un compañero que aún no aparece. Solamente la familia lo anda buscando en la CdMx.
Si no se ponen de acuerdo, se desaparece el dichoso bono de 31 millones de pesos. Los 15 millones de bono de gratificación lo recibirán solamente si firman el Reacomodo de Plazas. En el famoso reacomodo habrá liquidación de personal mayor de 60 años que quiera liquidarse.
Se sancionará a los obreros que no fueron a México con 2 mil pesos.
El comité autorizó la limpieza de fábrica y desmantelamiento de los molinos y aun así, los obreros que se quedaron a trabajar recibirán la sanción y les descontarán también sus dos mil pesos.
El lunes 6 de junio regresan a la mesa de negociación.
El reportero Roberto Moya estaba transmitiendo en vivo y cuando el hermano de Modesto le reclamaba por no estar cuando los golpearon y que ni siquiera los fue a visitar, Tomás ordenó que ya no se transmitiera y dio la instrucción que ningún obrero grabará con el celular la asamblea.
El compañero Marcos Carretero Moreno pidió la palabra y cuando estaba hablando, alguien se acordó que no había asistido a México y no lo dejaron seguir hablando, hasta Tomas le pidió el micrófono.
Veremos qué pasa este lunes”.