Huatusco;- Ciudadanos se sienten inseguros. Dos taxistas ejecutados, uno más lesionado con arma blanca y el secuestro de una familia, se registraron sólo durante esta semana.
Huatusco. Inseguridad y miedo vive la ciudadanía de este municipio enclavado en la sierra de las Altas Montañas, esto después que durante una semana se halla desatado la violencia de manera alarmante, sin que las autoridades policiacas de los tres niveles de gobierno puedan poner un alto.
El lunes 24 de agosto de este año, una familia de Tlacotepec de Mejía, fue secuestrada por sujetos desconocidos, cuando llegaban al estacionamiento de Bodega Aurrera, fue por la pronta actuación de agentes investigadores que se supo habían sido sometidos y encerrados en un hotel de la ciudad.
Tras la irrupción en el sitio, se logró rescatar a las víctimas y detener a dos de los presuntos secuestradores. Ese mismo día horas más tarde, un taxista fue asaltado por un sujeto que lo lesionó con arma blanca, por fortuna y gracias a la inmediata intervención de sus compañeros, el agresor fue detenido y entregado a las autoridades.
El martes 25 por la noche, fue ejecutado el operador del taxi número económico 22, a un costado de la carretera en la entrada a la colonia Vella Vista, el finado de 34 años edad, fue identificado como Minotti Helvesio Griego, mejor conocido como “Bezio”.
El jueves 27 por la tarde y ante la mirada atónita de pobladores, otro taxista fue ejecutado a plena luz de día e importándole nada a los sicarios, Juan Pablo Rincón, fue asesinado de varios impactos de bala, cuando viajaba en su carro por céntricas calles de la ciudad.
Pese a que al punto llegaron agentes de policía y se desplegó un fuerte operativo por la zona, los sicarios lograron escapar, evadiendo cámaras de seguridad y a los gendarmes de los tres niveles de gobierno.
Los ciudadanos mencionan sentirse inseguros y piden la intervención directa del gobernador, para investigar a la policía local, pues aunque se les ha comprobado algunas acusaciones y señalamientos , la presidenta municipal los mantiene en su puesto, sin importarle en lo más mínimo la seguridad de los huatusqueños.