El presidente describió la decisión como una medida disuasoria motivada por las amenazas de un antiguo dirigente ruso. No se sabe con certeza si algún submarino cambió realmente de posición.
David E. Sanger / The New York Times
El presidente Donald Trump dijo el viernes en sus redes sociales que le había “ordenado a dos submarinos nucleares” que se reposicionaran, en respuesta a las amenazas en línea del expresidente de Rusia Dmitri Medvédev, una inusual amenaza de escalada nuclear entre las superpotencias.
Trump dijo que había ordenado que los submarinos “se posicionaran en las regiones apropiadas, por si acaso estas declaraciones insensatas e incendiarias son algo más que eso”. Y añadió: “Las palabras son muy importantes, y a menudo pueden tener consecuencias imprevistas, espero que este no sea uno de esos casos”.
Medvédev, quien a menudo actúa como una especie de defensor del Kremlin en internet, había dicho el jueves en una publicación suya en las redes sociales que Trump debería imaginarse un escenario como el de la serie de televisión apocalíptica The Walking Dead y se refirió al sistema de la Unión Soviética para lanzar un ataque nuclear automático en el último momento.
Dado que los movimientos de los submarinos nucleares se encuentran entre las maniobras tácticas más secretas del Pentágono, lo más probable es que resulte imposible saber si Trump está realmente reposicionando los submarinos, o solo está tratando de mandar un mensaje.
Pero en la repentina confrontación por Ucrania de Trump con Rusia, es la primera vez que ha hecho referencia al arsenal nuclear estadounidense, por no decir amenazado con reposicionarlo. Trump afirmó el jueves que tiene la intención de imponer nuevas sanciones a Rusia por su falta de voluntad para poner fin a su guerra en Ucrania. Es el paso más reciente en su cambio gradual hacia una postura más antagónica hacia el Kremlin.
Sin embargo, esta exhibición pública de músculos nucleares es poco habitual incluso para Trump, quien la última vez que amenazó explícitamente con armas nucleares fue a Kim Jong-un de Corea del Norte a principios de su primer mandato, en 2018. En ese momento dijo que su “botón nuclear” era “mucho más grande y potente” que el de Kim. Aquel intercambio condujo finalmente a una apertura diplomática hacia Kim, a tres reuniones entre ambos líderes y a un rotundo fracaso de los esfuerzos por conseguir que el líder norcoreano renunciara a su arsenal nuclear, que ahora es mayor que nunca.
Pero Rusia es un caso diferente, y Trump ha hablado a menudo del temible poder de las armas nucleares, algo que afirma haber aprendido de un tío suyo que pertenecía a a la universidad MIT. Así, aunque el presidente de Rusia, Vladimir Putin, amenazó con poner en alerta a las fuerzas nucleares durante los primeros días de la guerra de Ucrania, y pudo haber estado preparando el uso de un arma nuclear táctica en otoño de 2022 contra una base militar ucraniana, Estados Unidos nunca ha respondido.
Medvédev es un buen catalizador para Trump; lanza regularmente amenazas contra Estados Unidos, pero básicamente no tiene ningún poder. Trump se ha referido a las declaraciones de tono bélico de Medvédev varias veces en la última semana.
No estaba claro a qué tipo de submarinos nucleares se refería Trump. Estados Unidos tiene submarinos de ataque de propulsión nuclear que buscan objetivos, pero también tiene submarinos mucho más grandes, de propulsión y armamento nucleares. Esos no necesitan reposicionarse; pueden alcanzar objetivos a miles de kilómetros de distancia.
Kingsley Wilson, secretario de prensa del Pentágono, remitió todas las preguntas sobre la declaración de Trump a la Casa Blanca.